Abril 1992 Madrid – Toledo
En detalles como este de Paco y C. notas que las cosas no son eternas. Su amistad hasta el verano pasado parecía indestructible. Luego aprecias que no es así.
En Toledo, todo el mundo con palmas y ramos de olivo en la mano. Dos mujeres se dicen: « Pero si todo eso de dios, de la iglesia, los curas y los santos es mentira! ». A pesar de todo, llevan ramos de olivo.
Muchas casas conservan el entramado godo de maderas. La expo sobre los austrias esta ya cerrando cuando llegamos. Bajamos hacia las murallas, y nos pasamos a comer al Mesón del Cardenal.
Sol esplendido después, sentados en las murallas, con algo de brisa. Desde aquí tienes una gran vista de Toledo precipitándose por la montana. A mi izquierda la iglesia de Santiago y la vieja puerta de Alfonso VI.
Vamos a visitar con mi madre la catedral que ella no ve desde hace cuarenta y cinco años gustos (estaba la última vez embarazada de Juan, mi hermano).
Miles des personas …. por la tarde subimos hasta el Parador para contemplar la bista momunmental del todo Toledo. La genta habla muy alto, sin avergonzarse de que los oigan los de alrededor.
La generosidad de Christa para con lo otros, la gente, la familia me asombra siempre. Soy mucho menos generoso …